Observo,
desde la oscuridad que gobierna en mi interior,
como continua moviéndose el mundo.
Abrumada por mis emociones,
sin comprender,
sin aceptar,
sin vislumbrar,
sin poder abarcar tanto dolor,
tanta confusión,
tanta tristeza
y tanto amor…
sin poder abrazarte
ni tan siquiera recordarte.
Por observar aun,
desde la oscuridad de mi temor
a aprender a vivir sin ti.