Amanece, sin calor.
Me despierto ajena
no quiero abrir los ojos,
tomar conciencia
afrontarlo.
Estoy cansada
agotada
agobiada,
de esta lucha diaria.
En un día como hoy
tan triste y lluvioso
nublado y gris,
en nuestra soledad,
con un papel y un bolígrafo
cuatro meses más tarde
de lo que fue demasiado pronto.
Después de nuestro acuerdo,
de sonreírnos,
de hablarnos,
simplemente se desvaneció.